Se pudo hacer más

 

El plan de juego de Mario Alfaro salió a la perfección, tanto en el desarrollo del juego, como en el resultado final. Los norteños fueron un equipo incómodo, de presión alta y orden en sus líneas. Por su parte, a los dirigidos por Mauricio Cruz les faltó lucidez en el último cuarto de cancha y mayor vértigo con el manejo del balón para variar el adormecedor traslado del esférico con el que intentó imponerse.

 

 

 

Lejos de ajustar para fortalecer el funcionamiento, Mauricio Cruz mermó la capacidad ofensiva de los Caciques al cambiar el sistema a línea de tres, fijando a Kevin González como tercer central y sometiendo a Vargas y Acuña a incomprensibles y extensos recorridos como volantes laterales. El "doble nueve" no surgió efecto y la propuesta nunca fue recompuesta.

 

Un disparo la poste y dos remates levemente desviados fueron las oportunidades más claras de gol de un Diriangén que deberá ajustar luego de un debut dónde se debió jugar mejor y se pudo hacer más.