Aciertos y desaciertos de Javier Londoño

Enumeramos lo que consideramos -a nuestro criterio- desiciones correctas y erradas por el director técnico colombiano

Tomó las riendas de Diriangén a la fecha 8 del Apertura y dentro de sus principales logros están el llevar el equipo hasta la final del torneo y ganar en Estelí.

Nuestra lista es la siguiente:

• Depositar confianza en jovenes. Acierto

Londoño le devolvió a titularidad a Valverde, Zapata, Parrales, Argüello y estos le respondieron de manera positiva. Además de ello debutó a los juveniles Eudis Gutiérrez, Jimmy Fuentes, Christopher Zelaya, Héctor Wilson y César Gutiérrez aunque ninguno logró obtener continuidad.

• Recuperar el toque a ras de pasto. Acierto

El juego en conjunto dotó de confianza al equipo, esto vino de la mano con la incorporación de los juveniles y mejoró las transiciones entre líneas para ir al frente, para replantear el parado del equipo y -sea o no relevante para muchos- mejorar la estética en el juego.

• Omitir las convocatorias. Desacierto

Por mucha mística o cábala que sea, hacer pública la lista de 17 o 18 jugadores convocados para cada fecha "no habla" de como se planteará un partido. El secretismo llegó a niveles tan exagerados como el de la lista de la final de ida, en este caso la convocatoria se conoció hasta 20 minutos antes del encuentro.

• Víctor Parrales como lateral derecho. Acierto

Por descabellado que se pensara antes de verlo jugar, a Víctor lo puso por la banda derecha y lo hizo bien mientras lo mantuvo en esa posición.

• Carlos Membreño como defensa central. Acierto

Si bien "kakay" terminó errando de manera garrafal en la final de vuelta esta es la posición en la que mejor se le miró. La línea de defensores que "armó" fue clave para ganar la serie de semifinal ante Estelí.

• Imponer disciplina. Acierto

Londoño sentó a algunos jugadores que parecían no estar "claros" de lo que significa vestir la camiseta de Diriangén. Primeramente las ausencias fueron recriminadas pero luego se filtraron las razones.

• "Bajar" a Giraldo o Martella. Desacierto

Ambos delanteros lucieron mal como enganches como como mediocampistas centrales, distinto a lo que se vió cuando jugaron juntos adelante.

• Llevar el equipo a Hossana. Desacierto

Por muy "extracancha" que sea el tema, al llevar al equipo al templo protestante terminó tocando una tradición de Diriamba, misma que aunque no está escrita en ningún lugar, "dicta" que los logros siempre son presentados ante el santo patrono de la ciudad, San Sebastián, en la basílica menor. Esto le provocó muchos detractores.

• Incrementar la carga física previo a la final de vuelta. Desacierto

La mezcla de sesiones en playa y cancha sintética dejó "cargados" a algunos jugadores y le hizo pasar apuros por el estado físico.

• Separar juveniles por el abandono de convocatoria nacional menor. Desacierto

Es sabido que la relación de Londoño con algunos juveniles no es la mejor, esto se evidenció en la manera en que los separó del primer equipo.

Cuando el colombiano dirigió una selección menor varios jugadores -incluidos algunos diriambinos- abandonaron una concentración de la escuela de talentos del fútbol.

En este caso FENIFUT ya había tomado "cartas en el asunto" al amputar a este grupo de juveniles de jugar pero al parecer el técnico no lo consideró suficiente.